/// PROYECTOS ANTERIORES - EXPLORACIÓN SUBTERRÁNEA \\\ > Desde el Recorrido.

Después de sondear aberturas y grietas del suelo, decidí introducirme en agujeros originados por la acción antrópica que modifica el territorio sin intención estética orientada por la búsqueda de recursos. Estas intervenciones generan paisajes de extraordinario interés por su dimensión y por ser huellas de una actividad de gran impacto transformador.
Las minas con mayores dimensiones del mundo se encuentran en Chile, allí recorrí la cantera de cobre de Chuquicamata, el tajo a cielo descubierto más grande del mundo, una honda brecha formada por la sustración directa de material sobre la tierra. Días más tarde, me desplacé de norte a sur para llegar a la mina de cobre de Sewell, el dédalo subterráneo más extenso del planeta.

Estos recorridos no se centraron únicamente en los espacios para la extracción, cerca de las minas siempre existe un poblado minero caracterizado por una historia marcada estrechamente por la relación que se establece entre el territorio, la mina y sus condiciones de vida.
Estos tajos que surgen de la acción de sustraer, a menudo experimentan crecimientos desmesurados, haciendo necesario el desalojo o incluso engullendo a los pueblos que las trabajan, generando otro tipo de agujeros simbólicos, en los que la arquitectura abandonada actúa como testigo de un tiempo pasado, convirtiéndose en patrimonio digno de preservar.