Paris - Palermo. Dialogues de láu-delà.
Las catacumbas de Palermo se encuentran en el sótano del Convento de los Capuchinos, este es un espacio concebido para ser lugar de sepultura desde un inicio, ya que originalmente era un cementerio. Fueron los monjes los que excavaron las primeras criptas subterráneas en el siglo XVI. La característica más significativa de este espacio es que los cuerpos eran embalsamados para conservar su forma en el tiempo.
Muchos se encontraban acostados, apilados en estanterías conciliaban un sueño profundo. Junto a los que descansaban en posición horizontal, se encontraban los mejor conservados que estaban en pie. Amarrados, atornillados, clavados, sujetos a la pared para mantenerse en una especie de vigilia eterna. El rictus mortuorio desfigurado en sus caras, parecía expresar el desacuerdo por la postura impuesta. Eran cuerpos sometidos, expuestos, condenados a la verticalidad, al no descanso.